PRECANDIDATOS
LAS COSAS QUE PASAN
Entendible que Ricardo Anaya, pretenda
convertirse en la opción A en la lucha contra AMLO.
Pero, ¿tendrá sustento descartar desde ya a José
Antonio Meade de la lucha por la Presidencia de México?
Desde luego que las precampañas son en realidad campañas en una coyuntura electoral donde la enorme inconformidad social apuntala las aspiraciones presidenciales de Andrés Manuel López Obrador.
Efectivamente López Obrador inicia, al igual que hace seis y doce años, encabezando las encuestas. La pregunta entonces tendría que ver si de nuevo la estrategia de lo que se conoce como el PRIAN, podrá bajarlo del ánimo social.
Las redes sociales irrumpen hoy con enorme fuerza en la coyuntura electoral y entonces el descontento popular por las reformas estructurales, por las alzas en los precios de las gasolinas, de las tarifas de energía eléctrica, del gas y de los productos de la canasta básica, juega a favor del candidato de Morena, ante el desespero de todos sus adversarios y desde luego del Presidente Enrique Peña Nieto.
Qué decir de la enorme corrupción que ha caracterizado a este sexenio y que le disminuye enormemente la posibilidad de éxito a José Antonio Meade.
Ricardo Anaya ha sabido moverse en la coyuntura de la sucesión presidencial.
Primero, desde la dirigencia nacional panista, se apropió de ese partido y nulificó a sus adversarios, ya a Margarita Zavala, ya a Rafael Moreno Valle, por citar a algunos.
Supo jugar bien de nuevo ya conformada la coalición Por México al Frente, y borró materialmente del mapa político a Miguel Mancera, que representó la principal opción perredista para buscar la Presidencia de México.
En este espacio dijimos y hoy lo reiteramos que Anaya es hoy para el PAN lo que hace pocos años representó Roberto Madrazo para el PRI.
El final de Madrazo resultó desastroso y el de Anaya quizá se le parezca.
Difícil, y mucho, el camino de José Antonio Meade.
Muchas las expresiones de descontento en su contra por los resultados de este gobierno del cual formó parte. A él se le responsabiliza, con razón o no, del “gasolinazo” y se le ubica además también como parte fundamental del equipo de “sabios” artífices de las reformas estructurales.
Entendible entonces el poco resultado de las estrategias mediáticas diseñadas para levantar su imagen.
Sin embargo esto apenas comienza.
Aún les queda un trecho a las precampañas, luego vendrá una poco entendible veda electoral de mes y medio, para luego entrar a las campañas en escenarios que pueden modificarse y donde contarán, y mucho, los nombres de quienes resulten candidatos al Congreso de la Unión.
Interesante también el análisis de la parte local del proceso electoral.
Ya veremos.
Por lo pronto AMLO y Anaya ya visitaron Sinaloa y Meade está por hacerlo.
Así están las cosas…