En conferencia de prensa, René Juárez agradeció a los dirigentes estatales, municipales y seccionales, así como a la militancia, que lo apoyaron en su paso por la dirigencia tricolor. Señaló que la derrota del 1 de julio del 2018, la cual se suma a las del 2000 y 2006, se debe reflexionar el por qué se llegó hasta ahí.
Se debe responder escuchando a la militancia, pues siempre ha sido mejor esta que la dirigencia. Señaló que el reclamo de la militancia ha sido la democracia interna para elegir a los dirigentes. Refirió que se debe aprender de las grandes lecciones. «cuando nos cerramos no entendimos los cambios de la sociedad», expuso.
Señaló que solo se ha adecuado «estéticamente al partido», por lo que se debe estudiar cual es la transformación del PRI. «Mi convicción me lleva a pensar que la democracia interna en mi partido es un factor fundamental para mantener vivo al partido», dijo.
Acompañado de liderazgos priistas y sindicales René Juárez apuntó que cuando quizo ser gobernador de Guerrero, tuvo que participar en un proceso interno, y la ciudadanía le dio la confianza pues el proceso democrático interno se había validado en una elección.
En ese sentido, expresó que sus líderes se deben elegir de manera democrática, desde la base, y que sea la militancia la que decida. «México a partir del 1 de julio es otro, y tenemos que aprender a conocerlo». Para renovar la dirigencia del partido es «imprescindible» que sea a través de un proceso democrática.
Señaló que la coordinación del grupo parlamentario del PRI en la Cámara de Diputados, será decisión de los legisladores. En una actitud de congruencia, anunció la renuncia de su partido. Señaló que desde este 16 de julio, quienes ocuparán la dirigencia será Claudia Ruiz Massieu, mientras que la secretaría general será para Rubén Moreira, de acuerdo con los estatutos.
Expresó que ambos cuentan con su apoyo para la nueva tarea en el PRI. Asimismo dijo que durante su mandato, llamó al priismo a la unidad, y refirió que el Revolucionario Institucional debe seguir soñando con la victoria, sin embargo, refirió que ve un partido alejado de la militancia, y que demanda democratizar sus procesos.
«Veo un PRI con necesidad de refundarce y volver a su orígenes», expresó. Refirió que hay tres procesos que deben terminarse. El reto que enfrentamos exige una reflexión, para regresar al poder debemos aprender de la derrota, la militancia debe expresarse. En la transformación del partido, dijo, los jóvenes jugarán un papel importante.
Consideró que se debe crear una espacio para la reflexión, a través de una comisión, que se instale cuando lo considere conveniente la nueva dirigencia, a fin que los priistas arriben a conclusiones importantes para la vida del partido.
«El desarrollo de México no se explica sin la participación de nuestro partido», en ese sentido refirió que serán una oposición responsable. «No es tiempo de repartir culpas, asumamos la responsabilidad que nos corresponde», dijo y señaló que militancia no es responsable de la derrota, y volvió a llamar a la unidad, sin interponer el interés personal o de grupo, por encima de la institución política. Señaló que dijo que llegó a la dirigencia nacional con la frente en alto, y con al frente en alto se va.
