CIUDAD DE MÉXICO (Proceso).-A los fondos de inversión, a las calificadoras y las empresas de servicios financieros extranjeros no les preocupa la eventual llegada de Andrés Manuel López Obrador a Los Pinos; tampoco ven el riesgo de una crisis económica en México ni la depreciación del peso más allá de la que provocan los factores externos. Sus pronósticos coinciden con los externados por los asesores del tabasqueño –con quienes incluso se han reunido– y contrastan con el pesimismo de instituciones como CitiBanamex, Bancomer y de un sector furibundo del empresariado nacional.
A diferencia de los magnates mexicanos, los representantes de los grandes fondos de inversión extranjeros –algunos de los cuales se reunieron con el candidato presidencial de la coalición Juntos Haremos Historia, Andrés Manuel López Obrador, el mejor posicionado en las encuestas– no prevén un retiro de inversiones ni una crisis económica o una gran devaluación del peso mexicano.
En su informe del 21 de abril pasado, CitiBanamex avizora un deterioro en la condición macro y microeconómica del país en caso de que López Obrador gane la Presidencia y prevé una volatilidad de peso.
Sin embargo, tras el anuncio del presidente estadunidense Donald Trump de imponer aranceles a la importación de acero mexicano, el peso se depreció aún más de lo que prevén algunos fondos de inversión que fueron encuestados por Nomura el pasado 21 de mayo.
Nomura, una de las empresas de servicios financieros más grande del mundo, encuestó a 109 de sus clientes inversores dispersados en todo el orbe, entre ellos fondos de inversión, bancos y miembros de la academia.
El resultado, dado a conocer entre sus clientes el 30 de mayo y del cualProcesotiene copia, revela que los fondos de inversión son los más optimistas en cuanto a la oportunidad para adquirir activos, que los banqueros vislumbran una depreciación de 5% frente al dólar (que es menor a lo devaluado la semana pasada tras el anuncio del arancel al acero), y, en el mejor de los escenarios, los fondos consideran una apreciación en el mismo porcentaje.