Ulises Ruiz Ortiz, líder de la corriente priista Democracia Interna, propone quitarle el poder del PRI al presidente Enrique Peña Nieto, quien determinó entregar las candidaturas a los ciudadanos, a los amigos y no a los militantes ni a los líderes del partido político.
“El poder no lo debe tener y nunca debió haber regresado a Los Pinos ese poder del presidente con el PRI”, manifestó el político priista, quien el domingo a la noche no acompañó a José Antonio Meade Kuribreña en su noche triste y donde hubo lágrimas. Pero ahora quiere una reconstrucción profunda del partido por su caída en las elecciones del 1 de julio de 2018, día en que se convirtió en tercera fuerza.
“No es el fin del PRI, porque en la democracia se gana o se pierde”, señaló el político priista, un par de días después de conocer que el abanderado de la alianza del PRI, PVEM y Panal quedó en un tercer lejano lugar y Morena se consolidaba como la principal fuerza política.
CRITICAN EL LIDERAZGO
Democracia Interna advierte que el presidente Enrique Peña Nieto y su gabinete son los responsables de la debacle del PRI el 1 de julio de 2018, porque impusieron candidaturas para los hijos, amigos y funcionarios sin carrera.
Los militantes, comandados por el exgobernador de Oaxaca, manifiestan que en la selección de candidatos a gobernadores, diputados, senadores, presidentes municipales y otros cargos prevaleció la imposición, el amiguismo, el compadrazgo y los caprichos de una clase gobernante insensible y prepotente.