Nueva York.- El juicio de “El Chapo” Guzmán se convirtió en una telenovela. La audiencia de Lucero Guadalupe Sánchez —quien lloró frente al capo y su esposa, Emma Coronel— sacó a relucir los detalles más melosos del narcotraficante.
Este jueves, los periodistas Alan Feuer, del New York Times, y Keegan Hamilton, de Vice, compartieron en sus redes sociales detalles de la testificación de la joven en la corte neoyorkina.
Originaria de Cosalá, Sinaloa, Lucero Guadalupe conoció a “El Chapo” cuando tenía 21 años [ahora tiene 29]. Él rondaba los 50 y ya estaba casado con Coronel. Comenzaron una relación y ella hizo de todo por él: acordaba envíos de mariguana, se reunía con pilotos y sembradores.
Feuer destaca en su crónica tuitera que la joven ex diputada de Sinaloa está muy alterada mientras testifica. Tiene un tic en los ojos, evita la mirada de Guzmán Loera y, en el receso, rompe en llanto. Emma Coronel, por otro lado, permanece tranquila mientras juega con su cabello y sonríe.
En la audiencia, se compartieron mensajes entre la amante y el capo, donde hay amor y drogas: ‘¿Están bien empacados, mi amor?’, escribió el Chapo a Lucero en enero 2012 respecto a un cargamento de mariguana. ‘¿Cuántos hay en cada paquete?’. Lucero responde: ’10 kilos, mi amor’”, tuiteó Alan Feuer.
Otro mensaje de Lucero Guadalupe a Guzmán Loera: Ella le dice que estampó la mariguana con un corazón y un número 4. ‘El corazón significa que te amo’, escribe, ‘y el 4 significa que bendigo el día que viniste a este mundo’. [El cumpleaños de Guzmán es el 4 de abril]”, agrega Feuer.
Poco antes de reiniciar la atestiguación, los reporteros informaron que se alargó el receso. Al parecer, la joven no dejaba de llorar.
El juicio iba a continuar con más testimonios de Lucero Sánchez. Pero ella estaba llorando sin control en el estrado de testigo.
El juez decidió no traer al jurado y extendió el receso. Emma Coronel, la esposa del Chapo, vio cómo se desarrollaba esto con una sonrisa burlona en su cara”, compartió Hamilton.
Una vez reanudada la audiencia, Lucero siguió su narración. Relató cómo huyó con el capo cuando la DEA y la marina, en 2014, irrumpieron en una de sus casas. Ambos estaban desnudos y salieron por un túnel debajo de una tina.
Una anécdota que explica el llanto de la “Chapo diputada”. Una vez estaban juntos Lucero Guadalupe y El Chapo, y a él le avisaron de la muerte de uno de sus primos. Así fue la reacción del sinaloense:
‘Primero no reaccionó: me vio muy seriamente. Después, dijo palabras que no me gustaron. Dijo que, a partir de entonces, cualquiera que lo traicionara iba a morir, aunque fueran de su familia o mujeres’”, detalló Sánchez.