El inmortal del beisbol mexicano, Arnoldo ‘Kiko’ Castro, fue llevado a la Galería de Guasavenses Ilustres por su gran capacidad deportiva que dejó una huella imborrable.
El guasavense quien debutó en el beisbol profesional en 1960 trascendió tanto que está en el Salón de la Fama del beisbol mexicano.
El guasavense que ingresó al sagrado nicho de los inmortales por su capacidad, murió a los 74 años.
Para hablar de su semblanza estuvieron al micrófono el secretario del Ayuntamiento, Miguel Ángel Robles, Miguel Alberto Lavagnino, quien habló emocionado de los logros de Kiko Castro y cerró ese círculo de participaciones el cronista Miguel Ángel Mezura, quien hizo referencia puntual de las hazañas del guasavense.
En su discurso la presidenta municipal Diana Armenta Armenta hizo referencia a la trayectoria y al significado que tiene para la familia el hecho de que el inmortal del béisbol mexicano esté incluido en la galería de Guasavenses Ilustres.